Edición crítica de los Escritos de San Francisco
Carlos
Paolazzi OFM
IV
Por Rafael Sanz Valdivieso OFM
Instituto Teológico de
Murcia OFM
Pontificia
Universidad Antonianum
El texto del Officium passionis Domini es la oración
más extensa compuesta por Francisco, con un total de quince salmos. Quizá fue
compuesto entre 1221 y 1223, después del Capítulo de las Esteras, época de las
tensiones comunitarias relativas a la composición de la Regla y periodo de
“tentación” de Francisco. En la
composición se contempla el misterio de la redención desde la Encarnación hasta
la Pascua, como ya indicaba el P. Esser[1], por lo que debería quizá llamarse Oficio
pascual, celebrando las maravillas que el Padre ha realizado en su “Hijo
dilecto”. Destaca el texto editado y la traducción un aspecto relevante, es la
oración compuesta por Francisco no tanto para tejer una serie de citas de
textos bíblicos, de los Salmos, sino para dar expresión a la exigencia interior
de Francisco, que ora con la Palabra y la convierte en espíritu y vida[2]; por eso deja que resuene la voz de Cristo
y de la Iglesia, ya que es una oración en plena consonancia con la Liturgia de
la iglesia, que reza unida con su Señor Jesús. El texto de los salmos según el
llamado Psalterium gallicanum
indicaría que es posterior a 1223 (cf. p. 66), fecha en la que el dicho
salterio fue normativo para la Orden.
Las Cartas reúnen
un total de once textos, que se sitúan, sobre todo, en los últimos años de su
vida desde 1219 en adelante, así la carta a los clérigos en sus dos redacciones
y la dirigida a las autoridades de los pueblos, de 1220 junto con las dos
redacciones de la carta a los custodios, en la que recomienda la difusión de
estos escritos epistolares. Quizá de los años siguientes sea también el
autógrafo a fray León, después de la carta a san Antonio y la carta a toda la
Orden, acercándola a las fechas posteriores a la cuaresma de san Miguel de
1224, fecha en la que se sitúa la segunda redacción de la carta a los fieles.
Las cartas son un
medio perfectamente adecuado para la animación comunitaria y para el anuncio
del Evangelio, teniendo en cuenta que esas cartas de contenido amplio serían
dictadas por Francisco – facere scribi
– y con un destinatario colectivo, en las que destaca su amor reverente por las
palabras divinas y por el cuerpo y la sangre del Señor, la devoción eucarística
que trata de promover en plena sintonía con la Iglesia, que son rasgos propios
de la madurez personal y espiritual de Francisco. A esa etapa final de su vida
pertenecerían los textos más extensos, carta a toda la Orden y segunda
redacción de la carta a los fieles (cf. p. 133) en las que destaca el proyecto
de vida cristiana y evangélica, en el que exhorta a los fieles a la veneración
de la eucaristía y de la palabras del Señor, y a los frailes a la observancia
fiel de la Regla. Las tres o cuatro cartas personales son más circunstanciales,
y serían la muestra de un número más amplio de misivas personales de las que sólo
queda mención en las fuentes.
3. En cuanto a las Reglas y exhortaciones, la edición del
P. Paolazzi da un relieve notable a estos escritos, característicos de la
radicalidad evangélica y del sentir con la Iglesia propios de Francisco de
Asís, por lo que son fundamentales en la legislación de los Frailes Menores,
textos en los que hay también una evocación resumida de los orígenes, como lo
dice en el Testamento: la luz de la
fe permite leer esos acontecimientos como una “revelación” de la vida según el
Evangelio, que hizo poner por escrito con brevedad y fue confirmada por el papa
Inocencio III; pero no sólo como norma de vida se comprende dicha revelación,
sino también expresión de la voluntad del Señor en la que entra “el don de los
hermanos” y el hacerlo según la santa Madre Iglesia, viviendo en fraternidad.
Es la experiencia franciscana transmitida también en las demás fuentes
franciscanas (la obra de Celano y las legendae).
De ahí el relieve concedido al Testamento
y a la Rnb y los fragmentos editados de
redacciones de la misma. La novedad de esta edición es la vuelta al texto según
la traición textual latina, de los manuscritos y de las ediciones del siglo
XVI, que ya había sido puesta de relieve por el P. Esser en un estudio
realizado con el P. R. Oliger[3]. Se puede decir que el texto de la Rnb,
conservando la división en capítulos y versículos de la edición de P. Esser,
remite a una tradición textual más depurada y sin tener en cuenta el inciso de
A. Clareno en el prólogo, así como la corrección del cap. XII, eliminando el v.
6 de aquella edición, por ser una interpolación posterior. También se coloca de
forma diferente el texto del versículo 21 del capítulo XXII, que afecta a los
versículos 20 y 21 de la edición de P. Esser. El texto latino, como en toda la
edición de los “Escritos” se ha
configurado según la práctica medieval, sin someterlo a la corrección gráfica
del latín clásico.
La novedad de los
fragmentos – los excerpta de la Rnb –
de redacciones alternativas de la Regla
no bulada, proceden de tres fuentes diferentes, del códice ms. 27 de la
Catedral de Worcester, de Hugo de Digne en su comentario a la Rb de la mitad del siglo XIII[4], y de Tomás de Celano, que utilizan un
texto añadido a la Rnb en el cap. X, 4 incluido en la redacción propuesta, lo
mismo que el pasaje del cap. XXII, 5 mitigando el texto de la Rnb por un rasgo
de tendencia más espiritual; lo mismo los retoques incluidos en cap. XXI,1 o en
VII,14 y XVI,10-11 referidas a la tribulación y la muerte, según Hugo de Digne.
Todos ellos deben proceder de una redacción intermedia de la Rnb entre el 1221 y la Rb de 1223 que destacaba las
exhortaciones espirituales dirigidas a los Frailes en conjunto – omnes fratres -. ¿Fue retocado el texto
en algún capítulo general de esos años
indicados? Si se hizo con vistas a una posible aprobación papal no es
posible saberlo con la documentación que poseemos en la actualidad, sobre todo
porque la redacción a la que se refieren el códice de Worcester, Hugo de Digne
y Celano parece que identificando el texto como una redacción diferente puede
indicar que ya la consideraban superada y considerada una etapa transitoria de
la evolución de la Regla de los Frailes menores.
En cuanto al
apéndice que contiene los “Dichos”, reunidos en la edición de P. Esser entre los
“Opuscula dictata” (agrupaba ocho textos) y en la edición española de 2003,
incluidos en las “últimas recomendaciones” (pero sólo el Testamento de Siena,
la Bendición a fray Bernardo, la Última voluntad a santa Clara, y la
Exhortación cantada ‘Audite poverelle’) y el texto de la Verdadera y perfecta
alegría en los avisos espirituales. Ahora los 3 “Dichos” que edita son: La verdadera y perfecta alegría, según
el texto contenido en el códice C 9.2878
de la Biblioteca Nacional de Florencia y publicado en AFH, aunque hay una redacción más completa y desarrollada en
sentido hagiográfico que se encuentra en los Actus beati Francisci y en las Florecillas[5]. El Testamento
de Siena, se encuentra en forma de bendición y exhortación dirigida a los
frailes según la Legenda de Perusa 59
que recoge la petición de Francisco a fray Benedetto da Piratro para que
transmitiera por escrito sus palabras de “bendición y testamento”. Se considera
un dicho auténtico de pleno derecho. La Bendición
a fray Bernardo, rescatada para la edición del P. Esser, es considerada un
dicho apócrifo por algunos autores, presente también en los Actus Beati Francisci de forma
diferente, aunque en la Legenda de Perusa,
12 aparece como última bendición a Bernardo. Se encuentra también en el Espejo de perfección 107 y es plenamente
coincidente con las formas y el pensamiento de Francisco en su expresión de
amor y obediencia a Bernardo como si fuera a él mismo.
Respecto de las
cartas perdidas o dudosas, que en la edición de P. Esser son consideradas no
auténticas o indicadas como cartas perdidas, entre ellas la carta a Hugolino,
la carta a los Frailes de Francia o la carta a los ciudadanos de Bolonia, ser
reproducen ahora según los testimonios relativos a cartas escritas realmente
por Francisco, y que comprende cinco textos: Carta a los Frailes de Francia, Carta a los ciudadanos de Bolonia, Carta a Clara y hermanas sobre el ayuno,
Bendición escrita para Clara y hermanas,
y la Carta a fray Jacoba, también el
texto de la Carta a Hugolino obispo de
Ostia. De nuevo los testimonios son la Vita
prima de Celano, las legendae y
el Tratctatus de adventu Fratrum Minorum
in Anglia, y la Tercera carta de
Clara, o los Actus Beati Francisci.
Ninguno de estos textos aparece en la edición de Los Escritos de san Francisco de Asís, por lo que ahora se han
incorporado a esta edición bilingüe con la correspondiente traducción y el
contraste con el texto de las mismas según la edición española de la Biografías
y legendae.
La presente
edición, texto crítico y traducción, quiere
ser una oferta de un texto fiable y cercano al que escribió o mandó escribir
Francisco, y a la vez que llegue al mayor número posible de personas, para que
puedan apreciar el “espíritu” de Francisco y el alcance de su experiencia vital
según la forma del santo Evangelio. Ojalá que los lectores no sólo aprecien el
trabajo realizado sino que, si hay fallos, los hagan saber amablemente para
poder repararlos y mejorar el texto en lo posible.
[1] Esser, Die Opuscula, p. 322.
[2] C. Paolazzi, Lettura degli “Scritti” di Francesco
d’Assisi, 2ª ed. ampliata, Ed. Biblioteca Frances-cana, Milán 2002, p. 56.
[3] Cf. K. Esser – R. Oliger,
La tradition manuscrite des Opuscules de saint François d’Assise. Préliminaires
de l’édition critique. Istituto Storico dei Cappucicini, Roma 1972 y el
complemento aportado por E. Kurten
ofm, “Weitere Textzeugen für die Opuscula des hl. Franziskus von Assisi”, en Collectanea Franciscana 45 (1975)
251-267.
[4] Cf. a edición de D. Flood,
Expositio super regulam Fratrum Minorum,
ed. por …, Ad Claras Aquas, Grottaferrata (Roma), 1979.
[5] B. Bughetti,
“Analecta de Sancto Francisco Assiensi saeculo XIV ante medium collecta e
códice Dlorentino C 9. 2878”, en Archivum
Franciscanum Historicum 20 (1927) 107. Cf. Actus, cap. VII, en Fontes
Franciscani, 2099-2101. Los Actus
fueron redactados entre los años 1327 y 1337. Florecillas, VIII en Fontes
Franciscani, 1140-1147. San Francisco
de Asís. Escritos. Biografías, 814-816.